Los gatos hablan con los ojos:
Los gatos tienen un lenguaje corporal bastante desarrollado y parte de este lenguaje se evidencia en sus ojos, posiblemente hayas escuchado que los guiños de ojo se consideran los “besos de los gatos”. A través de los ojos los gatos pueden expresar diferentes estados de ánimo, además de indicar cuando están tomando posturas intimidantes o cuando quieren apaciguar un encuentro que pueda terminar en enfrentamiento.
Por ejemplo una mirada fija sin parpadear puede ser una amenaza y los gatos la usan para disuadir a otros de entrar en su territorio a modo de advertencia. Igualmente podrás determinar su estado de ánimo dependiendo qué tan abierto tiene los párpados y qué tan dilatadas están sus pupilas, por lo tanto un nivel de excitación repentino puede hacer que la pupila de tu gato pase de un círculo que cubre casi todo su iris, ha una pequeña línea vertical.
Para los gustos los colores:
El color de los ojos de los gatos también es fuente de múltiples curiosidades, por ejemplo, todos, absolutamente todos los gatos nacen con los ojos de color azul y con el transcurso de los meses tomarán su color permanente. Esto se debe a un proceso de maduración del iris y la córnea, al final, cuando el ojo adquiere su color definitivo el gato tendrá también su visión completamente agudizada. Los gatos, al igual que los perros o lo humanos, pueden nacer con un ojo de un color y otro de otro, a esta condición se le denomina HETEROCROMÍA (es una anomalía de los ojos en la que los iris son de diferente color, también puede llegar a afectar a la piel o el cabello, pero el caso más común es en los ojos, total o parcialmente).
Pueden ver a color:
A diferencia de los perros los gatos pueden ver a color, en especial los colores de la escala del verde y el azul. Esto se debe a que además de los bastones también tienen conos en su retina, que son las células que se encargan de discriminar los colores, aunque no los perciben con la nitidez que nosotros lo hacemos.
No necesitan pestañas:
O por lo menos no las necesitan para lubricar sus ojos, como lo hacemos nosotros. Los gatos tienen un tercer párpado, que es en realidad una membrana que recubre el globo ocular y cumple con esta función.
Pueden ver en la oscuridad:
Es mucho lo que se dice por ahí sobre los gatos, por ejemplo no pueden ver en la oscuridad absoluta, sin embargo las habitaciones o exteriores en los que se cuele un poco de luz les permitirán ver en la oscuridad. Esto se debe a que los ojos de los gatos son muy grandes con relación a su cabeza (de hecho son los mamíferos con los ojos más grandes con relación a su cuerpo) y la forma convexa de la córnea posibilita una mayor entrada de luz.
Además el gato, al igual que nosotros, puede dilatar la pupila cuando está en la oscuridad, pero esta dilatación es mucho más grande que la que tenemos los humanos. Igualmente en las células sensibles a la luz de su retina el gato tiene una mayor cantidad de bastones que los humanos, por eso en ocasiones suelen afectarse los ojos con el exceso de luz.